La realeza se despide del príncipe Richard zu Sayn-Wittgenstein
El pasado 13 de marzo fallecía, a los 82 años, el príncipe alemán Richard zu Sayn-Wittgenstein Berleburg, un hombre no muy conocido en España, pero sí entre la realeza europea, pues estaba casado con la hermana de la reina Margarita de Dinamarca. Sin embargo, lo que sí suena con fuerza en nuestro país es su apellido, zu Sayn- Wittgesntein, el mismo que adoptó Corinna, la amiga del Rey Juan Carlos, tras contraer matrimonio con el príncipe Casimir y del que no se ha desprendido tras su separación. Debido a esta conexión, el funeral de Richard, que ha tenido lugar ocho días después de su fallecimiento, se ha convertido en un acontecimiento muy seguido por la prensa que aguardaba la llegada del ex de Corinna y de otros muchos miembros de la realeza europea.
Poco antes de las nueve de la mañana han comenzado los actos en la capilla del castillo de Berleburg, donde murió. Hasta ahí se desplazaron sus familiares más cercanos. Entre ellos se encontraban su mujer, Benedicta de Dinamarca (hermana de la reina Margarita), su heredero, Gustavo, y sus hijas, Alexandra y Nathalie, entre otros.
A las 14 horas empezaba la ceremonia religiosa a la que asistían miembros de las familias reales europeas. Allí se pudo ver a los reyes de Dinamarca, los herederos al trono, Federico y Mary, y los príncipes Joaquín y María. Y, por parte de la casa real sueca, a la reina Silvia y la princesa Magdalena, quien además es ahijada de la viuda.
Si bien la Casa Real española no ha enviado a ningún representante por tratarse de un acto privado, sí que se ha podido ver al hermano de la reina Sofía, Constantino de Grecia.
La ceremonia religiosa se ha celebrado a puertas cerradas y no se podrá emitir ni fotografiar nada del interior. La iglesia protestante de Berleburg acoge hasta a 500 personas que quieran decir adiós al príncipe Richard zu Sayn-Wittgenstein. Además, tras la ceremonia, la familia del príncipe prepara una recepción oficial en el castillo.